«¡ASÍ PAPI!» LA VECINITA QUERÍA VERGA
Su vecinita venezolana quería verga y lo llamó para que le llevara el huevo para mamárselo bien profundo, se atraganta como toda una traga sables, y poco a poco la van desvistiendo, tiene pelo negro, piercing en la nariz y brackets, después se pone de pie y la cogen parada en la cocina para luego, ir al sofá donde muestra su culito cabalgando, excitada dice “¡así papi!” después le aprietan las téticas clavándola de perrito y al final sin condón se la cogen de misionero mientras ella toca su clítoris, termina con la leche sobre su coñito cerrado.